Libros de

Alfredo Martín

Desde el año 1995 en el que publicó su primer libro

hasta el año 2013, Alfredo escribió 4 libros:

(1ª ed. 1995 , 2ª ed. 2006 / Al-Andalus Ediciones)

(Al-Andalus Ediciones, 2002)

(Gran Duque Editorial, 2011)

(Peñalobo Media, 2013).

· Con el aire a favor

· Con la luna por testigo

· Monteseros

· Fábulas de monte y luna

Fábulas de Monte y Luna (2013)

Es el cuarto y último libro de Alfredo que sale a la luz noviembre de 2013, titulado “Fábulas de Monte y Luna”, un retorno al mágico mundo de los cuentos y leyendas, ya que sus treinta y un capítulos están protagonizados y escritos por animales, lugares geográficos, meteoros, armas y otros diversos apechusques que el Tío Luna, como el resto de los cazadores, utiliza en el desarrollo de su actividad cinegética.

Realzan esta obra las magníficas ilustraciones de Pablo Capote y un sentido prólogo de José María Baranda.

Monteseros (2011)

El tercer libro de Alfredo es una novela titulada “Monteseros”, que versa sobre la vida de uno de esos últimos cazadores de oficio de Gredos. La novela, con ilustraciones de Pablo Capote Urosa y prólogo de Mariano Fernández Bermejo, se puso a la venta en las ediciones de Venatoria y Ficaar de marzo de 2011.

Con el aire a favor. 2ª Edición (2006)

A principios de 2007 se lanzó al mercado la reedición de “Con el aire a favor”, totalmente revisado y aumentado en diecinueve capítulos más. Se añadieron a las ilustraciones los bocetos de Victorio que se utilizaron para los cuadros de la primera edición. El prólogo a esta segunda edición es de Francisco Basarán, maestro de cazadores.

Con la luna por testigo (2001)

Su segundo libro, editado en 2001 y con el título de “Con la Luna por Testigo”, abunda en la misma línea del primero, siendo una sucesión de relatos de caza mayor y, muy especialmente, de los aguardos a los jabalíes bajo la luz de la luna. El prólogo es de Félix Díaz del Campo, conocido esperista y escritor.

Con el aire a favor. 1ª Edición (1995)

En 1995 publica en Toledo su primer libro titulado “Con el Aire a Favor”, en el que trata con detenimiento de las esperas, tema casi inédito hasta entonces en la literatura cinegética española. El prólogo es de su hermano Antonio, y sus vigorosas ilustraciones son una colección de óleos de Victorio Rodríguez Gómez, tío del autor.

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